EL ECONOMISTA, viernes 31 de enero de 2014.– A pesar de que las acciones de Amazon cayeron un 10% tras conocerse la debilidad de sus resultados del cuatro trimestre, tenemos motivos para seguir siendo positivos sobre el valor de esta compañía especialista en el comercio electrónico.
Amazon obtuvo un beneficio neto de 239 millones de dólares durante el último tramo de 2013, una cifra mayor a los 97 millones de dólares que registró en el mismo periodo del año anterior. Las ventas también aumentaron un 20% respecto al año anterior hasta 25,590 millones, pero muchos analistas habían esperado ingresos cercanos a los 26,000 millones durante el cuatro trimestre.
Amazon tiene un gran seguimiento, sigue siendo una de las "viejas" (consolidadas) empresas de tecnología. Podría haberse convertido en un “dinosaurio” dentro del nuevo mundo, pero la compañía ha logrado mantenerse a la vanguardia de toda la revolución de Internet. Por estas razones, Amazon es uno de los valores más importantes que tendríamos que vigilar, no solo en términos de precio sino también por el desarrollo y progreso de la compañía.
Al igual que Google y Yahoo!, Amazon ha tocado sus máximos históricos después de un 2013 “monstruoso”. El valor se dirige hacia un punto de ruptura para el mediano plazo, por lo que deberíamos dejarlo durante un tiempo después de presentar sus resultados.
Respecto a los niveles para vigilar, deberíamos centrarnos en la zona de 380 dólares como primer nivel de soporte. El segundo nivel se sitúa en los 360 dólares.
Invertir en otros valores tecnológicos. Desde el punto de vista técnico, muchas de las compañías de venta online, especialmente las más veteranas entre los valores ligados a Internet están negociando bastante bien.
